Para iniciar la tercera serie de la Biblioteca del Estudiante Universitario se eligió uno de los más valiosos manuscritos mayas, por el que puede apreciarse un aspecto de esa cultura: el Libro de Chilam Balam de Chumayel.
Muchas de sus páginas-según han observado los críticos-, dejan ver el estado en que se hallaban los indígenas de Yucatán después de la Conquista, y a través de ellas puede seguirse el proceso que de la transitoria sumisión condujo a la rebeldía, en una etapa de la historia de esa antigua y noble raza.
Por su contenido poético, por las muestras de arcaica poesía religiosa encerradas en varios pasaje, el códice de Chumayel interesó vivamente al poeta yucateco Antonio Mediz Bolio, quien emprendió la ardua tarea de traducirlo directamente del maya al castellano, y a pesar de las enormes dificultades que ofrecía, la terminó en Costa Rica, en 1930.
Al decidirse a reimprimir la única traducción completa de ese libro que hasta ahora existe en nuestro idioma, la Universdad Nacional de México pidió al licenciado Mediz Bolio-inconforme con su trabajo-que lo revisara y corrigiera, para que esta nueva edición, la primera que del Chilam Balam de Chumayel se hace en México, supere a la publicada once años antes. Contiene, como se verá, ilustraciones copiadas del original, que en aquélla no figuran.
Bajo la designación general de Chilam Balam se conocen, aproximadamente, dieciocho manuscritos en lengua maya que fueron escritos después de la conquista; en ellos se encierra parte de la sabiduría de los antiguos sacerdotes de la religión maya.
El contenido general de ellos es religioso e histórico; algunos refieren conocimientos médicos y astronómicos; otros incluyen ritos y leyendas de procedencia hispánica. Los principales Chilam Balam son el códice Pérez , el de Chumayel, el de Oxcutzcab, el de Nah, el de Teabo y el de Tekak.
Antonio Mediz Bolio (1884-1957), político, abogado y literato, se caracterizó por el gran amor que profesó a su natal provincia de Yucatán y quedó incorporado a las letras mexicanas con La tierra del faisán y el venado (1922). Con el mismo interés, pero con carácter erudito, realizó la traducción y los comentarios del Chilam Balam de Chumayel, obra que ahora ponemos al alcance del estudiante universitario.
Bajo la designación general de Chilam Balam se conocen, aproximadamente, dieciocho manuscritos en lengua maya que fueron escritos después de la Conquista; en ellos se encierra parte de la sabiduría de los antiguos sacerdotes de la religión maya. El contenido general de ellos es religioso e histórico; algunos refieren conocimientos médicos y astronómicos; otros incluyen ritos y leyendas de procedencia hispánica. Los principales Chilam Balam son el códice Pérez, el de Chumayel, el de Oxcutzcab, el de Nah, el de Teabo y el de Tekak. |