“Las ideas pueden ser y son cosmopolitas”, observó Chateaubriand; y ciertamente el alcance del movimiento romántico del siglo XIX fue el más vasto imaginable: llegó a todos los rincones de Europa, y de allí se trasladó a América. Este libro ofrece un estudio general del movimiento- en literatura, pintura, música, filosofía, religión y otros campos- junto con una interpretación detallada de todos sus elementos básicos: intelectuales, emocionales, sociales e históricos.
La revuelta inicial contra las ideas del siglo XVIII es analizada en el marco general de la historia; después se ilustran y ejemplifican ideas y sentimientos románticos en particular, en retratos de algunos de los personajes más sobresalientes de movimiento. Quedan así minuciosamente documentadas las fases sucesivas de las creencias de figuras clave, como Schelling, Coleridge y Lammennais, indispensables para todo estudio de romanticismo.