Escribió, entre novelas y cuentos, casi una treintena de títulos. La bienamada es su última novela. Después de este libro que, tal como afirma su autor, es de finalidad francamente fantástica, por lo que se ha sacrificado a dicha finalidad la verosimilitud en la ilación de los sucesos, Hardy se dedicó exclusivamente a la poesía y llegó a escribir una decena de notables colecciones de versos.
Tildado de inmoral y obsceno, el autor dejó de escribir novelas y se dedicó a la poesía. Sin embargo dejó varias obras que han perdurado. En La bienamada el joven escultor Pierston parece pertenecer a la noble estirpe de los poetas románticos: busca, encuentra y abandona a varias mujeres, hace largos y azarosos viajes, triunfa como artista, emprende discursos, cruza su vida con una madre, su hija y su nieta. Novela original y atrevida, de lectura avasallante.