Los editores son pieza clave en la maquinaria contemporánea del libro. Su función consiste en ayudar a que los autores produzcan mejores textos, en lograr que las ideas comerciales se materialicen en obras que satisfagan al público, en contribuir a que un original se convierta en miles de ejemplares impresos, en mantener vivo el fondo editorial. Al elegir y desarrollar los proyectos que darán forma a su catálogo, el editor debe atender simultáneamente la calidad de las obras -sean literarias o de referencia, escolares o de esparcimiento- y la naturaleza del mercado para alcanzar el precario equilibrio entre creatividad y rentabilidad. En el mundo editorial de hoy, los editores deben ser capaces de apreciar la buena prosa, identificar los nichos de mercado, impulsar a los autores cuando tienen dificultades, así como promover los proyectos dentro y fuera de la editorial, invertir sensatamente los recursos a su cargo y producir un impacto benéfico en las finanzas de la empresa. Y aunque las exigencias parecen enormes y muy desgastantes, este oficio sigue siendo una de las actividades más placenteras en el universo libresco.
Esta obra ayudará a los editores, especialmente a los que encargan y contratan libros, a cumplir de mejor manera sus obligaciones. Sin pretender resumir en recetas simplonas el complejo proceso editorial, presenta temas fundamentales como:
- la elección de lo que se publica (y cómo eligen los autores dónde publicar),
- la contratación de obras literarias y de no ficción,
- el seguimiento del autor (de la contratación a la entrega del original),
- el proceso editorial,
- la gestión estratégica y financiera del catálogo,
- el desarrollo y mantenimiento del catálogo,
- el trabajo en equipo.
Gestión de proyectos editoriales. Cómo encargar y contratar libros se ha traducido al japonés, al chino -tanto en Taiwán como en China continental- y al alemán, y está preparándose la versión en coreano y en polaco. Las muchas pautas de comportamiento que sugiere y sus atinadas advertencias para evitar problemas, más los estimulantes estudios de caso que presenta, harán que quien lo lea simplifique y mejore su quehacer cotidiano para poder dedicarse al meollo del oficio editorial: buscar por todas partes obras que merezcan ser publicadas.