La jaula invisible es una metáfora del tiempo, el camino recorrido por Arthur Rimbaud hasta llegar al lavadero alquímico de la poesía en un hospital de Marsella. Henri Michaux no se halla en ningún lugar y se recorre, hurga mientras revela el secreto esencial que, desde su infancia, sospecha existe en cualquier parte. ¿Cómo es posible se pregunta el autor, con Michaux, en esta relación a veces pormenorizada que en esto se ocupe la inteligencia de manera capital, que de alguna manera permanezcamos obligatoria y prodigiosamente aleras, indaguemos, exploremos, hurguemos? ¿El mundo sería distinto si André Bretón hubiese aceptado la inverosímil propuesta de Antonin Artaud y hubiese testimoniado sus recuerdos posteriores a cincuenta estados de coma? Quizá para la poesía, pero, con todos los miramientos posibles, el poeta surrealista fue en la extensión de la palabra- lapidario: entre el hombre y la sociedad en que vivió Artaud hubo un contrato tácito que prohibía sus comportamientos extremos al cerrar tras él las puertas del manicomio o la cárcel. El surrealismo es la representación de lo informe, la expresión del inconsciente o de la consciencia no organizadaSin embargo, para Alberto Savinio, el surrealismo de Giorgio de Chirico su hermano de leche, como dice- pretende darle forma lo informe, conciencia a lo inconsciente, representaciones que se resuelven en la quietud del tiempo cualquier infinita tarde de verano.