En la página del entorno consta de textos que combinan narrativa con poesía y ensayo como minificción, cuento o relato con el realismo propio de la autoficción. El resultado fue que partir de la metaficción literaria hola hay un descubrimiento científico hola pues interpretando del entorno individual lo que tiene de sueño, el inconsciente, se conocen detalles del pasado y el presente. Se realiza así una aportación a la psicología ya la física demostrando que la realidad posee una estructura dinámica que puede ser leída; varios textos narran los experimentos. Ignacio Trejo Fuentes escribió: “debo decir que Mario es un profesor de literatura en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, que estudió en la UNAM y que ha desarrollado un procedimiento científico, como él lo llama, de adivinación. Siguiendo a Freud y a Jung, como propone que existen dos tipos de realidad, una externa y una interna, y que la vida puede leerse como se lee un texto literario, pues ahí a la vista de quien posee la sensibilidad y conocimientos, están todas las cosas del pasado, del presente y del futuro. Y él mismo es capaz -me consta- de aplicar tales principios: puede decir cualquier persona, conocido o no, qué le ha sucedido antes, qué le está ocurriendo y que le pasara con sólo mirar alrededor del analizado. Para no conceder que padece demencia, ha comprobado la validez de su sistema ante científicos quienes delante de las evidencias no han tenido más remedio que certificar la exactitud de sus ejercicios de adivinación.
En varios de los relatos aparece una constante: quién narra (alter ego de Calderón), analiza las etimologías de varios nombres y encuentra que siempre estos corresponden a la personalidad de quien los lleva puestos. Y la verdad que sus ejemplos convencen. Y otra vez, debo decir que ésta es una práctica real y cotidiana de Mario.
Por lo demás, si se pudieran dejar de lado los planteamientos teóricos de Mario Calderón, sus relatos tienen el vigor necesario para poder leerse con frescura e interés permanente, porque sabe contar y lo hace con un dominio notable del lenguaje: no en balde sabe tantas etimologías y es así mismo poeta (…) es uno de los libros menos convencionales que he leído.