Cuarenta y nueve movimientos es un libro que mezcla géneros y multiplica estilos: salta del ensayo al cuento, al flujo de conciencia y a veces al párrafo, a modo de viaje cultural y narrativo que se va representando en una extensa gama de escrituras. Aborda una agenda intelectual contemporánea sobre la espiritualidad, a veces en voz de su protagonista, el metamorfósico B: el budismo primitivo, los poetas orientalistas, los cátaros, la gnosis europea, los evangelios apócrifos, la meditación, el zen, la budiatría actual, ciertos brujos, algunas pérdidas y amores rotos, varias transubstanciaciones, muchas mezclas e intercambios, la crisis del mundo moderno, etcétera: búsquedas múltiples de aquella dimensión cognitiva y literaria propuesta por una obra tan original e inesperada como ésta. Cuarenta y nueve movimientos: cuarenta y nueve pasos para la danza de la conciencia, cuarenta y nueve jugadas en el ajedrez de la imaginación.