La revista El Cuento, que en diecisiete años ha compilado material narrativo universal y en los últimos años particularmente de autores latinoamericanos, recibió en julio pasado el Premio Nacional de Periodismo 1981 en difusión cultural. Fue éste un justo reconocimiento a una tarea de difusión y estímulo al género cuentístico, como quizás no lo ha realizado ninguna otra publicación. En esos diecisiete años, El Cuento ha recopilado más de mil relatos, formando la más vasta y rica antología del relato breve, con autores de todos los tiempos y de múltiples países, algunos remotos o desconocidos literariamente. Su prestigio rebasa nuestras fronteras y es muy apreciada no sólo por su amenidad y variedad, sino porque resulta una especie de taller cuentístico, una guía, un comparativo excelente, un estímulo no sólo para quienes escriben, sino para quienes no lo habían intentado, y una puerta abierta que ha servido para dar a conocer también a inéditos o jóvenes escritores. Edmundo Valadés ha seleccionado aquí de los publicados en El Cuento algunos de los cuentos que él considera entre los demás interés o de mejor artificio, en una antología muy personal, decidida por quien sin duda ha probado ser un compilador certero. El resultado es una sucesión de cuentos que interesarán a cualquier lector y en cuya suma están los secretos, las malicias, el oficio de narrar. Edmundo Valadés (1915) es autor de los libros de cuentos La muerte tiene permiso, en décima edición que rebasa ya cien mil ejemplares; Las cualidades funestas y Sólo los sueños y los deseos son inmortales, palomita. También de las antologías El libro de la imaginación, selección de textos breves y Los grandes cuentos del siglo XX. Es editor de El cuento y coordinador de la diaria sección cultural del periódico Excélsior.