Enciclopedia de la Literatura en México

Librería Robredo

El español Pedro Robredo, fundador de la Librería Robredo, se formó como librero en la Librería Porrúa. En 1908, se separó de esta empresa y en octubre de ese mismo año se estableció en la casa número 14 de la calle Puente de San Pedro y San Pablo (hoy, tercera calle del Carmen, esquina con segunda de San Ildefonso). En 1918, Robredo deja este lugar para instalar un despacho de libros en la calle del Relox número 3 (hoy, Argentina); tiempo después, en febrero de 1919, se traslada al número 1 de la primera calle del Relox (en lo que fuera la esquina que formaban las calles de Argentina y Guatemala), en donde funda la Librería Robredo en compañía de su hermano Juan; librería que, en manos de don Pedro Robredo, perdura hasta el año de 1934.

En 1935, Pedro Robredo traspasa la librería y se marcha a vivir a Puebla, donde muere. José Porrúa Estrada, uno de los tres fundadores de la casa Porrúa, adquiere la librería a la cual incorpora en sociedad a sus hijos: José, Jerónimo y Rafael Porrúa Turanzas; cambia entonces la razón social por la de Antigua Librería Robredo, José Porrúa e Hijos. El negocio permanece en el mismo lugar. En 1941, al morir José Porrúa, su hijo José quedará al frente de la librería durante ocho años; en 1950, se marchará a España. La librería, entonces, queda a cargo de Jerónimo Porrúa hasta 1974, año en el que muere.

A partir de ese momento, Rafael, el tercero de lo hijos y el hijo de éste (que lleva el mismo nombre), se encargan del negocio. Al realizar las obras de excavación, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, se descubre que precisamente debajo de la Librería Robredo está la Coyolxauhqui. Rafael tiene que trasladar el negocio a un pequeño local en la esquina de Havre y Reforma, el cual es cerrado sólo unos años después, al haber sido dañado por el sismo de 1985. Rafael decide finalmente donar su acervo a la Universidad Nacional Autónoma de México y muere en diciembre de 1988.

Pedro Robredo fue también editor y se dedicó al rescate de libros antiguos; la experiencia de la casa, como él mismo lo declaró durante la ceremonia de celebración del aniversario número 25 de la librería, se encauzaba hacia la compra y venta de libros de historia de México y de libros antiguos impresos en México o en el extranjero que se ocupan de la historia de los problemas nacionales.

Asociado con el español Luis Rosell, Robredo compró la Imprenta Aldina en la que publicó: La Historia General de las cosas de la Nueva España, de Fray Bernardino de Sahagún, y La historia verdadera de la Conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo, entre otros. Como miembro de la Junta Directiva de la Sociedad de Bibliófilos Mexicanos, Pedro Robredo realizó las ediciones facsimilares de Grandeza Mexicana, de Bernardo de Balbuena; Obras de Carlos de Sigüenza y Góngora; Poemas inéditos, de Fray José Manuel M. de Navarrete, y La Crónica de la Merced de México, de Fray Cristóbal de Aldana.

La Librería Robredo se especializó en libros de ocasión. José Porrúa y sus hijos continuaron con la línea y el criterio que siguió Pedro Robredo en su librería en cuanto a la compra y venta de libros antiguos.

La Antigua Librería Robredo, José Porrúa e hijos, realizó tertulias a las que asistieron, entre otros: Luis González Obregón, Artemio de Valle-Arizpe, Manuel Toussaint, Genaro Estrada, Francisco Gamoneda, Carlos Rojas Peña, Francisco de la Maza, Andrés Henestrosa, Jesús Reyes Heroles y José Rojas Garcidueñas.

La nieta de José de Porrúa, hija de Rafael, conserva una pequeña parte del acervo de la Librería Robredo en un local ubicado en la esquina de Venezuela y Brasil, y se llama simplemente “Librería”.