Los ensayos que acompañan este libro van de la mano de una escrituta nítida, minuciosa, hasta podríamos decir estricta mas no por ellos rígida. Estricta porque responde a un estilo infatigable de precisión y de cuidado admirables. Alfonso Reyes, Nélida Piñón, Gilberto Owen, Francisco Tario, la reflexión sobre la literatura, el mundo, el dolor, la melancolía, el cuerpo, la medicina, el Paseo de la Reforma y otros temas son los que podemos encontrar en estas veredas amplias y bien trazadas; unas llevan a otras, y ciertamente –entre autores y temas literarios– podemos seguirnos para hablar del mundo y su extensión, lo ancho y lo angosto, lo propio y lo ajeno.
Paola Velasco da prueba de un libro maduro y a un buen tiempo. "Como palomitas frente a la luz, damos vueltas en torno a problemas que han sido tratado hasta el cansancio pero que nos siguen perturbando, y volvemos a ellos dispuestos a estrellarnos otras vez", así, estos ensayos perturban, plantean, semejan ir a algún sitio de donde quizá no sabiamos la posibilidad; son ensayos claros e inteligentes; centauros o palomillas los lectores podrán aventurarse –de golpe o poco a poco– por estos caminos que han sido hechos de buena fortuna, de buen método, de buenas exploraciones.