Carlos de Sigüenza y Góngora inició una polémica sobre
qué eran los cometas con la publicación del Manifiesto filosófico contra los
cometas, con el cual quería tranquilizar a la gente por la reciente aparición
de uno de ellos. A este Manifiesto contestaron varios personajes, el de mayor
importancia fue el padre Eusebio Francisco Kino con su Exposición astronómica
del cometa de 1680, donde expone las opiniones de Sigüenza y Góngora en cinco
argumentos y las suyas en seis fundamentos; Sigüenza se sintió tan agraviado
que decidió responder, por ello escribió la Libra, aunque no fue él quien la
publicó, sino Don Sebastián de Guzmán en 1690. Con la Libra, Sigüenza quiere
terminar con creencias tales como que los cometas se forman de lo exhalable de
cuerpos difuntos y del sudor humano, que son precursores de sucesos
calamitosos, etc. Este trabajo refleja el estado de la ciencia y del
conocimiento en general de la época.