La vasta obra literaria de Rafael Solana –narrativa, teatro, ensayo, poesía, periodismo y una labor editorial cuya trascendencia huelga señalar– sostiene el lugar de privilegio que éste ocupa en el desarrollo de las letras mexicanas. Resulta entonces de sumo interés asomarse a algunos de los textos de juventud de Solana que la investigación y selección de Raquel Huerta-Nava trae nuevamente a la luz en este libro. Una mirada a momentos fundacionales de la historia literaria mexicana a través de los ojos veinteañeros de Rafael Solana nos ofrece un disfrute por partida doble: un testimonio de primera mano sobre la década que cubre esta antología y la oportunidad de ser a nuestra vez testigos de los pasos tempranos de Solana, pasos que se prolongarían hasta el florecimiento de la extensa obra de madurez que todos conocemos