Para apartar a sus lectores de las "pastorelas endiabladas" escribió El Pensador mexicano una nueva. Pero Luzbel sigue haciendo de las suyas. Hace magia, como también se hacía en las comedias de magia de aquella época. Y la víctima sigue siendo el tragón Bato, a quien Gila termina poniendo en su lugar. Que no se propase con su conducta machista. Los otros pastores también tienen sus debilidades, muy humanas y, por lo tanto, muy cómicas.
A pesar de que el género tenía más de dos siglos de existencia en la Nueva España, la Pastorela en dos actos es uno de los primeros textos que fue publicado (1817) y que ha podido ser rescatado. Fernández de Lizardi, como transmisor de tradiciones populares, también dedicó textos dialogados a la Virgen de Guadalupe y al Día de Muertos