El lector tendrá en sus manos un compendio de ensayos y artículos de crítica literaria. En la escritura, como en sus acciones de promoción cultural, Marco Antonio Campos elabora obras forjadas con pulso milimétrico y escrupulosa argumentación. Le va la vida en ello. Como a muchos otros de sus maestros y colegas que lo anteceden, como Rubén Bonifaz Nuño, Alí Chumacero, Octavio Paz o José Emilio Pacheco, Campos desea ser recordado como poeta, pero su ánimo creativo se expande sin remedio hacia otros discursos y busca dar en el blanco de la narrativa, el periodismo, la traducción, la crónica y, por supuesto, de manera especial, en el ensayo. En su pluma, en ocasiones, la biografía y la crónica se amalgaman con la crítica. Es el caso del conjunto de textos que constituye Indicaciones. Por algunas de estas piezas el poeta Campos será también evocado y requerido.
En el corpus de esta muestra pasan, bajo la lupa del autor, figuras admiradas como Alejandra Pizarnik, José Revueltas, Pablo Neruda, Blanca Varela, Juan Gelman, Juan Manuel Roca, Antonio Cisneros, Jaime Sabines, Hugo Gutiérrez Vega, Alí Chumacero, Evodio Escalante, junto a otras que están cerca del afecto y la vivencia, pero sobre todo del oficio de lector. La pintura y el cine son presencias manifiestas en la formación intelectual de Marco Antonio Campos; en ambos universos visuales deja testimonio de su pasión y conocimiento. Es ésta, sin proponérselo, una lección de escritura, pero sobre todo de lectura, de fructífera memoria en la memoria de los otros, sus lectores.