Este libro es mucho más que un diálogo, quizá se trate de una biografía armada con retazos de una vida; quizá, de un ensayo construido a base de paciencia, sacrificio y admiración por un hombre que hizo mucho por la literatura mexicana, particularmente en el género cuentístico donde destacaba como profundo conocedor, crítico notable capaz de descubrir y propiciar talentos ajenos.
Luis Leal, amigo de sus amigos, se dispuso a ser pionero de enormes autores como Juan Rulfo, Juan José Arreola, Carlos Fuentes, Emmanuel Carballo y Mariano Azuela, de quien fue especialista, dándolo a conocer en Estados Unidos. Odilón Vargas, sensible y trabajador incansable, demuestra lo que puede lograr un maestro cuando encuentra a un discípulo dotado y generoso.