La literatura norteña, si cabe el concepto, es amplia y variada. No hay tema que no toque y aunque se la quiera estereotipar, en lucha constante consigo misma experimenta y genera corrientes temáticas en los espacios de su influencia.
Los puntos de vista expresados en este libro, muestran la variedad y riqueza de los tonos con que modela sus estéticas, No es solamente el desierto barroco de Sada, sino todas las voces, una polifonía en proceso de maduración y crecimiento.
El cambio ha sido su vocación, quienes pretenden inmovilizarla en algún momento específico de nuestra historia literaria, la petrifican y reducen. Muchos son los aciertos que la ubican en un lugar de la literatura en lengua española, muchos serán mañana.