Para Tom, una proposición científica (matemática) sería capaz de, al menos, explicar el suceso de una velada: ese instante que durante una noche de fiesta —aderezada con algo de alcohol, música electrónica y divagaciones sobre James Morrison— ha modificado sustancialmente la vida de tres mujeres y la de él. Tom, próximo a doctorarse en matemáticas puras, es profesor de Betty y de Gaby, estudiantes de filosofía; pese a sus ecuaciones, ha terminado por enamorarse de Gaby y entablar una relación con ella; desde hace quince días viven juntos. Lucy es vecina de Betty. Los cuatro coinciden en una reunión: Betty baila frente a Tom y Gaby baila con Lucy. Eso es todo: los cuerpos de tres mujeres y un hombre han necesitado bailar.