Búsqueda, encuentro y sujeción, El diario de la Riva conduce al lector a dos mundos aparentemente contradictorios pero vinculados por la curiosidad y la afinidad. Es una suerte de invitación a descubrir nuevos valores en lo cotidiano a través de su interpretación, de la reflexión de los pequeños actos diarios sin significado aparente que revelan otros aspectos de la realidad. A través de una sencilla estructura narrativa, Martínez Torres nos presenta el mundo de las pequeñas guerras desatadas en el interior de cualquier espíritu reflexivo.
En esta novela de José Martínez Torres, el protagonista, Ariel, cuenta sus vicisitudes como bibliotecario en un colegio de monjas. Apasionado de los libros y aspirante a escritor, dotado de humor e ironía, Ariel es también un intelectual alcohólico y enamoradizo que termina burlado por cada mujer con la que se relaciona. De la Riva, la joven heroína del relato, que puede inspirarnos lo mismo amor que inquietud, deseo y melancolía, llega a convertirse en su musa y obsesión. El tono general de la historia se resume en la frase: “Tener dinero, ganarse el sueldo, vivir con una mujer o con una familia son elementos cruciales para ir con seguridad por la vida, y yo no tenía nada de eso”.