Su padre le enseñó a valorar el amplio universo cultural de los indígenas, al cual pertenecía, por lo que, durante su niñez, combinó ambas culturas. Realizó la carrera de Teatro en Bellas Artes, a la que ingresó a los trece años. En la Universidad Nacional Autónoma de México cursó la licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras (ffl) recibiendo su título en 1993; hizo también estudios en la Facultad de Derecho (fd). Fue becario del Centro Mexicano de Escritores junto con Inés Arredondo, Guadalupe Dueñas y Vicente Leñero (1961-1962); se preparó en Dirección Teatral con Salvador Novo y tomó cursos de Dramaturgia con Luisa Josefina Hernández. Estudió Cine con Pier Paolo Pasolini becado por la unam (1972). Fue uno de los pioneros del teatro universitario promovido por Héctor Azar; en la preparatoria fue actor y asistente de dirección del grupo Teatro en Coapa (1955-1957); participó en Teatro El Caballito como adaptador y director de algunas obras, entre ellas el cuento de Juan Rulfo "Anacleto Morones". Fundó el Teatro Pedagógico (1960), dependiente de la Subsecretaría de Asuntos Culturales de la unesco para promover el teatro en las escuelas secundarias. Fundó la Asociación Teatro de México con Graciela Orozco, Lourdes Canele e Irene Sabido, en 1964; a la que después se integraron Soledad Ruiz y José Solé. Dicha agrupación, de autogestión cultural, se ha interesado en el rescate de la tradición del teatro español de los Siglos de Oro, el teatro ritual mexicano, la pastorela, danzas y demás espectáculos indígenas de la época colonial y de evangelización, logrando rescatar y localizar más de 500 documentos. La Compañía ha presentado más de cuarenta obras en el ex convento de Tepotzotlán, adaptadas y dirigidas, muchas de ellas, por él, entre 1964 y 1977; la primera fue La pastorela de Metepec. La Asociación ha impartido talleres gratuitos para escribir e investigar sobre la pastorela y ha promovido diversos festivales para difundirlas, en colaboración con Arturo Morell y Maricela Lara. Creó la Compañía de Teatro Náhuatl, con la asesoría de Miguel León Portilla y Eduardo Matos, en 1987; en 1991 fundó la Casa del teatro Náhuatl para difundir estos espectáculos, ubicada en el Centro Histórico. Paralelamente trabajó para Telesistema Mexicano, después transformado en Televisión Vía Satélite (Televisa), empresa a la que ingresó a los catorce años y colaboró en la misma durante treinta y siete, con diferentes cargos: vicepresidente del Departamento de Investigación y Evaluación (1972); director del Instituto Mexicano de Estudios de la Comunicación (1974); organizador y productor de espectáculos para televisión y teatro. Escribió para Ernesto Alonso telenovelas históricas; con sus amigos del Centro Mexicano de Escritores creó la serie Las momias de Guanajuato (1964); escribió, dirigió y produjo varias telenovelas de corte educativo, propuesta que ha llevado a distintos países como: China, Filipinas, Kenia; dirigió el Canal 8, actualmente 9, el Canal cultural de Televisa, a partir del 4 de abril de 1983 hasta el 19 de noviembre de 1990; como director del mismo, suscribió un convenio con la unam para que ésta se hiciera cargo de la barra matutina (de 8 a 15:30) de dicha estación y promovió programas culturales: El tesoro del saber, Estudio 54, Contrapunto, Videocosmos, Tú a alguien le importas, entre otros. Produjo la película A Mexican Answer sobre la televisión mexicana, dirigida por Luis de Llano Macedo. Al salir de la televisora fundó la Compañía Nuevo Sol, dedicada a la producción de cine, televisión y teatro. Ha impartido cursos sobre entretenimiento educativo en India, China, Austria, Filipinas y Kenia. Ha sido profesor del posgrado de la Universidad de Southern de California desde 1997. Sus primeras telenovelas educativas se presentaron en países que viven problemáticas comunes; en tanto que sus pastorelas se reestrenan de continuo en la Ciudad de México, en el interior del país y en el extranjero.

Miguel Sabido Ruisánchez, dramaturgo, investigador teatral, comunicador y promotor del entretenimiento televisivo de carácter social y de la cultura teatral, conecta sus distintas tareas de tal forma que sus investigaciones sobre el teatro ritual popular mexicano se manifiestan en las adaptaciones que hace sobre el teatro de evangelización o de las pastorelas tradicionales, y además se reflejan en sus propias pastorelas que tratan de adaptarse al mundo contemporáneo respetando los elementos básicos del género: la anunciación, las tentaciones, las batallas y la adoración después del triunfo de los pastores; en ellas lo ritual y lo religioso marcan su estructura, así como el humor y la crítica a lo social. En El libro de las pastorelas reunió algunas de las más representativas por apegarse a la tradición (Pastorela de Bartolo y Charrasquilla); por combinar lo indígena con la cultura novohispana representada por Sor Juana (Pastorela de Sor Juanita o virreinal); por tratar de recordar nuestras raíces mestizas (Pastorela del ermitaño); por ocuparse de la injusticia que se vive en las cárceles (Pastorela de la esperanza); por recordar el sentimiento de solidaridad que despertó entre los mexicanos el terremoto de 1985 (Pastorela de la fraternidad) o por recordar año con año la tradición de la adoración del niño Jesús en la Pastorela mexicana o en las llamadas pastorelas navideñas. Ha realizado espectáculos populares que retoman la tradición náhuatl como La adoración de los Reyes Magos, de la adoración al niño Jesús; en El día del Juicio Final recuerda la profecía del fin del mundo; ambos espectáculos se adaptaron al mundo contemporáneo aunque se representaron en náhuatl, tuvieron montajes multitudinarios y fueron el resultado del sincretismo cultural. Su película Santo Luzbel presenta la lucha de una comunidad indígena por recuperar sus valores e identidad en un poblado de la sierra de Puebla, donde representar la danza de San Miguel y Luzbel les acarreó la censura y el rechazo. Su teatro reunido en Tres retratos femeninos constituye lo que él llama espectáculos tonales y producto de la investigación, donde combina el lenguaje dramático con el poético y parece dar un lugar privilegiado al monólogo; el libro reúne Las tentaciones de María Egipciaca, en la cual recrea la vida de esta santa, una mujer perseguida e incomprendida en su época e incluye fragmentos de poemas de Sor Juana, Blas de Otero, Octavio Paz, Santa Teresa y del propio Sabido. Falsa crónica de Juana la Loca se ocupa de la vida de Juana de Castilla, Juana la Loca, quien en la obra hace una valiente defensa del amor. En Las transfiguraciones de Sor Juana hace un homenaje a la personalidad y la obra de Sor Juana Inés de la Cruz. En Las mujeres de Troya, basada en obras de Eurípides, ubica la historia en la época actual, para hablar de los derechos humanos y sobre todos de los de las mujeres, reprimidas y relegadas social y sexualmente. En Malas palabras, su único libro de poemas, hace una reflexión sobre la dificultad que tiene el mexicano para aceptar la diversidad cultural que lo marca como indígena y mestizo, tras quinientos años del descubrimiento de América; habla de la actitud malinchista del mexicano y de su rechazo al otro que no es más que a él mismo. El trabajo de Miguel Sabido para la televisión mexicana marcó un rompimiento con los cánones tradicionales del entretenimiento y la telenovela, al darles un toque social con temas de la historia mexicana y su trasfondo educativo. Sus telenovelas buscaron informar y concientizar al público respecto a la problemática social: la alfabetización en Ven conmigo; la planificación familiar en Acompáñame; la educación sexual en Vamos juntos; la educación sexual para jóvenes en Caminemos; la igualdad de los sexos y la lucha contra el machismo en Nosotras las mujeres o la situación de los niños de la calle en Los hijos de nadie. En tanto en sus telenovelas históricas realizadas junto con el historiador Fausto Zerón Medina y los escritores Eduardo Lizalde y Carlos Olmos hace una reflexión sobre la vida del México independiente, pasando por Los caudillos, enfocada a la guerra de Independencia que abarca de 1798 a 1848; La tormenta que va de la época de la Reforma a la Revolución; La Constitución que abarca la decadencia del Porfiriato hasta la promulgación de la Constitución de 1917 y finalmente, Senda de gloria, sobre el Porfiriato. Todas ellas impulsaron valores nacionalistas. Como parte de este trabajo publicó Don Daniel en la televisión, tres entrevistas que hizo al intelectual mexicano, junto con Lolita Ayala, Talina Fernández y Félix Cortés Camarillo, con motivo del Primer Encuentro Mundial de la Comunicación. Sus investigaciones sobre la representación y la teoría teatral cobran vida en su tesis de licenciatura: Teatro ritual popular mexicano: antecedentes y perspectivas, y en El tono, andanzas teóricas y aventuras prácticas, en el cual además de hablar de teatro se ocupa del espectáculo ritual y el entretenimiento televisivo como formas complementarias de la expresión humana. La teoría sintónica, que parte del estudio de la representación desde la época clásica hasta la actualidad se apoya en las zonas de energía, en las reacciones y efectos de respuesta cerebrales, en el análisis y exploración del comportamiento humano; plantea el control de las emociones mediante el estudio y conocimiento del funcionamiento pulsional: propuesta que ha ido construyendo, aplicando y afinando a lo largo de los años.