Alberto Onofre es el mejor mediocampista creativo que ha tenido el futbol mexicano. Sin embargo, una fractura doble -de tibia y peroné- sufrida a tres días del Mundial México 70 lo deja fuera no sólo de la justa, sino del reconocimiento universal como uno de los grandes del balompié de todos los tiempos. Su historia -un devenir lleno de dificultades para, finalmente, convertirse en futbolista profesional con el Guadalajara-, sus triunfos -la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Winipeg, Canadá, de 1967, con la selección juvenil de México; el campeonato de liga 1969-70 con las chivas- y su tragedia, son contadas por Agustín del Moral Tejeda, quien a su vez entremezcla a lo largo del relato su propia historia como un pasionario caído del Rebaño Sagrado, del mismo Onofre, de la vida, en una especie de juego de espejos y espejismos entre el ídolo y el aficionado. Un crack mexicano? es una obra trágica para adentrarse en las turbulencias y huracanes tanto de un deportista en específico como de cualquier hombre.