El proyecto Mitóxix comenzó como una convocatoria abierta para escritores noveles y amateur que desearan aprender nuevas perspectivas poéticas a través de un colaboratorio poético México-España con Proyecto Genoma Poético.
El objetivo primordial de Mitóxix era no sólo transmitir la pasión por la escritura poética y alentar el proceso creativo, sino proporcionar herramientas útiles desde perspectivas profesionales que encaminaran el gusto por el género hacia una pasión fundamentada. Los talleres, coordinados por Samantha Saavedra, fueron una pieza clave para lograr este desarrollo. Para impartirlos, se pensó en escritores y profesionales que tuvieran diferentes perfiles, con el propósito de mostrar un pequeño abanico del mundo poético, sus técnicas y estilos.
Los participantes que aparecen en esta edición son quienes se mantuvieron desde el inicio hasta el final. Cinco lo hicieron a distancia y tres de manera presencial. El proceso duró tres años. Tiempo en el que la idea original sufrió transformaciones y adaptaciones. Una búsqueda en la que el único objetivo fue no abandonar el barco y continuar picando piedra para labrar otras formas y encontrar nuevos caminos.
Es altamente gratificante pensar que Mitóxix ha sido el vehículo de transmisión de una energía invisible que surge desde la entraña para transformarse en algo tangible. Nos llena de orgullo ver esta idea concebida no sólo por la calidad de los trabajos que surgieron a partir de la experiencia, sino por lo nutritiva que ha resultado para todas las partes involucradas que mantuvieron su fe en una idea poco común que requirió paciencia y perseverancia.
Para Mitóxix la célula es el poema. El poema como célula debe reproducirse y dividir su núcleo como un proceso cíclico para producir múltiples células que al principio son idénticas pero que después resultan en una diferenciación.
Plasmar el crecimiento individual a través de un proceso colectivo que atraviesa el Atlántico para mostrar esta pluralidad literaria es invaluable. Haber impulsado este proyecto y poder materializarlo, aun cuando hubo momentos en los que parecía imposible seguir adelante, es en sí mismo un acto de salvación poética.
Fernanda Oyarvide