“He deseado que Huberto Batis pudiera estar una vez más en la Redacción de Sábado, atado de nueva cuenta a su mesa de trabajo plena de papeles, libros, con las palomas marcando su área territorial. Como dice el título del filme póstumo de Nicholas Ray, We Can’t Go Home Again: No podemos regresar a casa, otra vez. Es verdad, sin embargo, ¿qué otra cosa ha logrado Catalina Miranda con el hilo de su Editorial Ariadna al haber enredado nuestros textos en este volumen? En un giro simbólico, palabras y memorias han conseguido algo tan formidable como salvar a Teseo de las garras del Minotauro, algo quizá igual de valioso, pues ha alcanzado a abrir puertas y ventanas a nuestros recuerdos para que se diera el regreso a ese antiguo hogar literario denominado Sábado, del Unomásuno, en la época gloriosa en que lo dirigióel centauro Quirón del periodismo cultural mexicano: Huberto Batis.
Nedda G. de Anhalt