Jorge Volpi recomienda quemar este libro antes de abrirlo, de otro modo uno corre el peligro de quedar atrapado entre sus páginas. Con un violento pincelazo, Ignacio Padilla muestra caracteres tan humanos que, más que pertenecer al mundo literario, parecen emerger de la realidad misma: terrena, intensa y desesperanzada. Atados por lazos de fraternidad ambigua, los personajes de los tres cuentos que integran este libro respiran una melancolía expresada en una prosa breve e intensa, tan característica del escritor y que lo ha hecho acreedor de los premios Juan Rulfo y Efrén Hernández.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2010. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.