A lo largo de esta obra, la autora nos ofrece una lectura que resalta la riqueza y complejidad de tres novelas de Golding: Los herederos, Cristopher Martin y La aguja. En ellas, los personajes ponen de manifiesto la ineludible paradoja del ser humano, quien al no poder tener una visión objetiva de sí mismo, se engaña sin remedio. Sus personajes, víctimas de la mentira, de la soberbia y de la ceguera moral, muestran una ineludible inclinación al mal, y su conducta y sus motivaciones son la clave para que el lector pueda penetrar en el lado oscuro del corazón humano. De hecho, como se ha dicho, el tema central de las novelas es la oscuridad que se manifiesta en distintos sentidos paradójicos, como el lado siniestro del alma, como el inconsciente y como lo indescriptible y misterioso.