Muchos pudieron o quisieron pensar, una vez que cesaron los estrépitos más virtuosos del boom, que la literatura latinoamericana entraba a desmayarse un poco, demasiado exigida por sus recientes triunfos. Engaños o ilusiones de lo aparente: la transformación mercadológica; en otras palabras el salir de pobre y comenzar a repetir fórmulas de algunos, nos afectó, por cierto, una suerte de nerviosa confianza en lo que la literatura significa, en la diferencia radical que instaura, en el cambio que genera. Y, a juzgar por los trabajos que componen Vertiginosas textualidades, significa cada vez más, tanto que suscrita trabajos como éstos, en una relación de reconocimientos y respeto recíproco, que establece un viaje de ida y retorno a tales textos tales trabajos, en la mejor tradición de la llamada crítica literaria.
Este libro no es el primero de Noé Jitrik, lo preceden varios volúmenes de parecido registro. Como ellos, éste ha de ser indispensable para poder ver con más precisión y dramatismo lo que textos como los de Onetti, Borges, Calvino, Eco, Reyes, González, Palés Matos, Rosa Bastos proporcionan una riqueza que ofrecen en sus manos textuales y que no es tan evidente en su esplendor a la primera mirada.