Tomás Espresate fundó la Librería Madero en la calle de Madero, número 12, en el centro de la Ciudad de México.
Espresate llegó a México como parte del grupo de españoles exiliados en 1939. La Librería Madero permanece hasta nuestros días y cuenta con un amplio surtido de libros, pero se dedica especialmente a la venta de ediciones lujosas, libros de difícil acceso y obras peculiares.