Nació en la Ciudad de México, el 11 de marzo de 1920; muere el 9 de julio de 1990. Dramaturgo. Estudió Derecho y la Maestría en Letras en la unam, así como Técnica Cinematográfica en Hollywood. Fue director escénico en las compañías de Virginia Fábregas, María Teresa Montoya, Virginia Manzano, Ofelia Guilmain y Tita Merella; también de la Unión Nacional de Autores y de la Compañía de Repertorio del inba, con la cual realizó giras en México y en el extranjero; director de su propia compañía durante treinta años; asesor general de la Dirección de Corporación Mexicana de Radio y Televisión. Entre 1940 y 1990 puso en escena las obras Los diálogos de Suzette, Laberinto, Faustina, Voz como sangre, La que se fue, Cada quien su vida, La locura de los ángeles, El escándalo de la verdad, Íntimas enemigas, La gobernadora, Cadena perpetua, Mañana será otro día, Asesinato de una conciencia y La vida difícil de una mujer fácil. Colaboró en Excélsior. Palmas de Oro 1979 del Círculo Nacional de Periodistas de Espectáculos. Medalla Virginia Fábregas por 25 años de labor en el teatro de la anda. Medalla María Tereza Montoya por sus brillantes giras en el extranjero de la anda. Medalla de oro de la sogem por sus cincuenta años como escritor. Medalla Agustín Lara de la Sociedad de Compositores. Premio Juan Ruiz de Alarcón 1956, 1967, 1986 y 1990 por Miércoles de Ceniza, Con la frente en el polvo, El candidato de Dios y Corona de sangre. Vida, pasión y muerte del Padre Pro, respectivamente.
Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras y se graduó como abogado en la Escuela Nacional de Jurisprudencia de la Universidad Nacional Autónoma de México. Desde muy joven escribió crónicas teatrales y artículos literarios para diarios y revistas de México y del extranjero. En 1942 cursó Técnica Cinematográfica en Hollywood. A su regreso escribió argumentos y adaptaciones, algunos en colaboración con Xavier Villaurrutia. Se dedicó al teatro como dramaturgo, empresario, organizador y director artístico de varias compañías profesionales, entre las que estaban la de María Teresa Montoya, Andrea Palma y la suya. En 1949 llevó en gira por España a doña Virginia Fábregas, con actores y repertorio exclusivamente mexicanos. Después de esa gira regresó a México y organizó la primera temporada de la Unión Nacional de Actores, de la que fue nombrado director artístico en 1953. Puso en escena más de un centenar de obras de diversos autores mexicanos y las suyas propias. Dirigió la Compañía de Repertorio del Instituto Nacional de Bellas Artes (inba), con la que realizó giras por el interior del país e hizo temporadas en Los Ángeles, California, y en varias ciudades de Iberoamérica. Fue coordinador del Teatro Popular de México y de la Compañía de la Asociación Nacional de Actores (anda). La primera de sus obras, Los diálogos de Suzette, fue estrenada por Rodolfo Usigli en 1940 con el grupo Teatro de Media Noche. Colaboró en El Heraldo de México (1970-1976); en "Diorama de la Cultura", con crítica cinematográfica. En Excelsior escribió crítica teatral y un artículo semanal en la página editorial. A partir de 1975 fue comentarista de televisión, habiendo tenido a su cargo los programas El Club del Espectador, Marquesina y Tribuna Pública. El 15 de marzo de 1979 fue nombrado asesor general de la Dirección de Corporación Mexicana de Radio y Televisión.
Luis G. Basurto, dramaturgo, director y productor teatral, crítico literario y de cine. Su dramaturgia se ciñó a la línea tradicional de la alta comedia española, la cual se atiene a las tres unidades. Procuró dibujar a sus personajes con ingredientes humanamente efectistas y eficaces. Escribió dramas, melodramas, comedias, sainetes, autos sacramentales, piezas y farsas. Reveló preocupación por temas sociales e intimistas, a los que les dio un trasfondo religioso o creó para ellos personajes de este ámbito social; por ejemplo, Con la frente en el polvo plantea la crisis de conciencia que vive un sacerdote al reflexionar sobre su actitud ante la vida y la sociedad. En Piedra de escándalo, uno de los seis personajes es un obispo, quien en compañía de sus amigos de juventud se preocupa por el momento histórico que vive el país. En Asesinato de una conciencia habla del problema de la guerrilla y de la acusación que pesa sobre un sacerdote por participar en ella. En Miércoles de ceniza el amor prohibido, entre un sacerdote y una pecadora, pone en juego la fe de él y los valores de ella. En El candidato de Dios es quizá donde se apega más al tema religioso, al abordar la muerte del papa Juan Pablo I. Cada quien su vida, su obra más representada, muestra un interés por los problemas sociales y va delineando la vida de cada uno de sus personajes para construir el microcosmos donde se mueven, el cabaret y el bajo mundo. La problemática existencial y la crisis de valores aparecen en Toda una dama donde un mundo de apariencia rige la vida de los personajes de la clase acomodada; en tanto la usura y la maldad son el hilo conductor de La locura de los ángeles que se sitúa en una vecindad. En Frente a la muerte, el adulterio conduce al drama; en El escándalo de la verdad la confrontación de valores entre padres e hijos desmorona su imagen. En Laberinto, el amor enfermizo de la madre orilla al suicidio del hijo. En La gobernadora plantea el problema de la corrupción política y habla de un mundo de apariencias por medio del cual se pretende destacar en sociedad. El tema político reaparece en Corona de sangre al abordar la muerte del padre Pro. Hay en sus obras una postura ideológica bien definida relacionada con el compromiso social y su convicción religiosa.
Instituciones, distinciones o publicaciones
Premio Nacional de Dramaturgia Juan Ruiz de Alarcón
Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura INBA
Sociedad General de Escritores de México (SOGEM)
Diorama. Suplemento cultural de Excélsior
Premio Nacional de Dramaturgia Juan Ruiz de Alarcón