De nacionalidad francesa, residió en México desde 1969. Realizó sus estudios primarios y secundarios en escuelas francesas de diversos países: Río de Janeiro, Rabat, París, y los de bachillerato, en el Liceo Franco Mexicano de la Ciudad de México. En 1972 obtuvo un diploma de Estudios Literarios, con especialidad en Letras Hispánicas, en la Universidad de París y siguió cursos en la Facultad de Filosofía y Letras (ffyl) de la Universidad Nacional Autónoma de México (unam). En 1976 aprobó el examen profesional como traductor de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (unesco) en París. En el Colegio de México (colmex) realizó estudios de Traducción y de Lingüística y, de 1979 a 1981, fue investigador del programa para la “Formación de Traductores”. Trabajó como traductor en la Secretaría de Relaciones Exteriores (sre), Petróleos Mexicanos (pemex), Comisión Nacional Azucarera, unesco, Organización Internacional del Trabajo y otros. Entre 1972 y 1975 trabajó como asistente en varias productoras y distribuidoras de cine y televisión en México y Francia. Produjo y participó en la dirección del documental Los reyes de Nayar, para la televisión francesa. Dirigió obras de teatro, colaboró en la puesta en escena del montaje de The Engels Family, dirigida por Juan Carlos Uviedo, y dirigió la pieza teatral El último ángel, inspirada en textos de Jean Cocteau, estrenada en la Alianza Francesa de México, institución donde coordinó en 1978 las actividades culturales. Tuvo a su cargo varias exposiciones de pintura: “Julio Castellanos”, en 1982; “Abraham Ángel y su tiempo”, en Monclova, Coahuila, en 1984; “Antonio, El corcito Ruiz” y “De su álbum, inciertas confesiones”, en 1985; “Enrique Guzmán” (1952-1986), en 1987; “Modernidad y modernización en el arte mexicano”, en 1991; “El corazón sangrante”, en Boston, en 1991 y, en 1997, “David Alfaro Siqueiros: Retrato de una década”, en Houston, Texas; Santa Bárbara, California, y en Londres. Colaboró regularmente en Artes Visuales, Historia, México en el Arte, Opus Gay, “La Cultura en México”, Unomásuno, Los Universitarios, La Jornada, y en las revistas francesas: Masques, L'Ecrit-voir y Photographies. Sus artículos aparecieron en el diario Reforma y en su suplemento cultural “El Ángel”. Participó en el programa del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (cnca) “Creadores en los estados”, en 2001 en Colima y, en 2002, en Tijuana, Baja California. Fundó y fue el primer director de curare, asociación de críticos de México; con Cuauhtémoc Medina y Álvaro Vázquez  se encargó de la curaduría de la exposición “La era de la discrepancia. Arte y cultura visual en México, 1968-1994”, exhibida en el Museo Universitario de Ciencias y Artes (muca) (2007). En 2004 fue nombrado responsable de las colecciones de arte contemporáneo, de la Dirección General de Artes Visuales de la unam y asesor por México del Recovering the Critical Sources of Latin America and Latino Art del International Center for the Arts of the Americas (icca), de Houston. Se encargó de reunir la colección que alberga el muca, abierto al público en noviembre de 2008.

Olivier Debroise, historiador y crítico de arte, curador, cineasta y novelista. Sus libros son la confluencia de observaciones sobre la historia y el presente. En Diego de Montparnasse rastrea el ámbito en el que se desenvolvió Diego Rivera en sus años juveniles en París. Figuras en el trópico es la reconstrucción del movimiento colectivo que experimentó la pintura nacional a partir de la Revolución Mexicana y que no puede ceñirse a los tres grandes muralistas: Rivera, Orozco y Siqueiros. En este ensayo concede su legítimo lugar a pintores como Abraham Ángel, María Izquierdo, Rufino Tamayo, Fermín Revueltas y otros. Su primera novela, En todas partes, ninguna, los acontecimientos ocurren en los albores y desenlace de la lucha armada de 1910, marca el fracaso actual de esa lucha. Las anécdotas fluyen en torno a Pedro Ángel, un acaudalado yucateco; a través de su vida presenciamos la Guerra de Castas, la lucha socialista de Carrillo Puerto, la Revolución Mexicana. Su segunda novela, Lo peor sucede al amanecer, es una crítica de la modernidad mexicana; la capital del país ha perdido su rostro y la presenta como una urbe deforme, donde sobresalen la violencia, la corrupción y el crimen. La tercera y última novela, Crónica de las destrucciones, se desarrolla en el periodo inicial de la Colonia y presenta al mundo azteca a través de tres personajes que proponen un mundo ideal; se distingue su narración por la recreación que hace del náhuatl, tal como se hablaba en el siglo xvi, en el recién conquistado territorio. En sus numerosos ensayos críticos sobre artes plásticas, aparecidos en diarios y revistas, incluye también aspectos biográficos, políticos y anecdóticos.