¡Ay, qué vida tan chaparra!, de Orlando Ortiz nos repite una hermosa lección para nuestra existencia: más vale andar en los hombros de la imaginación para que la vida no nos agarre a ras de suelo. Cuatro cuentos que al leerse de corrido se convierten en una interesante novela sobre el mundo de los niños. “La escuela chillona”, “Los apuros de Justino”, “Los bichos justicieros” y “La pequeña y los reyes”. Cada historia nos permite ver que no estamos solos en el mundo y que hasta los seres más diminutos enfrentan las adversidades sin bajar la guardia. Es cierto, la vida nos exige estar preparados; no sólo para defendernos del peligro, sino para saber el momento preciso en que pasamos cerca de la felicidad y, alertados, echarle el brazo encima.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2011. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.