Ah, no recuerdo su nombre,
pero era poderoso,
era el señor fama y poder
que tomaba decisiones;
tundía a los hombres
como si fuesen sacos de semillas,
entendía a su manera
qué es el bien, qué es el mal
y malgastaba el agua
mientras al pueblo lo acosaba la sequía.
Nadie recuerda su nombre,
pero era poderoso;
el más poderoso de los hombres.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2025. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.