La mira de la presente antología, en sentido general, es revelar fracturas narrativas, identidades textuales asomadas a disímiles recovecos del país. Los relatos reunidos no persiguen una clasificación generacional ni el estudio sistémico de un proceso. Tratan más bien de constatar un gesto. Los autores expuestos al juicio del lector tienen un punto en común: despliegan su labor desde territorios no metropolitanos, lanzan una mirada crítica sobre el bagaje sustentador de sus respectivos escenarios vivenciales. Si bien todos prueban trayectoria en el oficio, la visión conjunta, sinuosa, resbaladiza, registra un proceso en constante contrucción.
Óscar Barrientos Bradasic
Además, como habitante la frontera más norteña de México y por ende, de Latinoamerica -no miento, un pobladito de Mexicali que se llama Los Algodones es el lugar más septentrional del continente- sé que la frontera es más que el muro de Trump, que existen diversas fronteras, simbólicas e inasibles, y que el norte no solo es un punto cardinal. Por eso estos cuentos hablan de muchas fronteras, no solo de las geopolíticas, y también de muchos nortes, no solo de una región particular. Pues, bien, estoy muy satisfecha con esta muestra ecléctica de la narrativa joven mexicana; estoy muy agradecida con los antologados y con la editorial porque no hay nada más valiente y esperanzador que publicar libros en medio de una pandemia; y, por supuesto, estoy muy orgullosa de mis decisiones, tanto, que voy a tomarme una cerveza (no importa cuando leas esto).
Elma Correa
[Además incluye a los siguientes autores César Tejada, Karla Michelle Canett y Liniana Pedroza.]
