«Sara, una mujer poco convencional, rompe con estereotipos primordiales como la necesidad de tener un hombre, el estigma de ser madre soltera y más importante aún, la dificultad de sobresalir laboralmente, porque es una joven arqueóloga reconocida a nivel internacional. Su intelecto y personalidad deslumbran, despertando rivalidad en sus compañeros de trabajo, y competencia o celos de mujeres que la idealizan. Sara personifica la dualidad en el ser humano; los claroscuros. Sara no es una mujer perfecta, pero sí un suspiro en nuestra vida; un ejemplo de grandeza, porque aun viviendo la peor de las tragedias ella sigue, quizá no con la misma actitud desafiante, pero sigue, y nos obliga a cuestionar en qué lugar del camino seguimos aferrados. La autora parte de una ilusión, recordándonos lo complejo de la maternidad, el dolor de las pérdidas, el temor a vivir y la magia del conocimiento. El manejo de tiempos en este libro es tan preciso que nos engancha a seguir leyendo hasta terminar y cuando terminamos deseamos volver al inicio, releer pasajes donde la alegría nos desborda haciéndonos cómplices de quimeras; los azules, verdes, el color tierra; viento, nostalgia, el vacío; la remembranza del primer amor. Sara se queda en nosotros y vuela muy alto, agraciada, observándonos para capturar su esencia. Susana vuela alto como su protagonista y nos regala una historia atrapante».
Del Prólogo: "El arte de ensoñar". Inés Récamier
