Está el lector ante diez historias que debieron ocurrir en momentos y circunstancias que nadie previó. Son relatos que lo mismo nos cuentan lo que aconteció en pequeños poblados del Estado de México que en medio de la campiña inglesa. Otros carecen de las coordenadas necesarias para ubicarlos. Algunos de sus personajes pertenecen a tiempos pasados, otros son de estos años. Las historias se nutren de asuntos que, aparentemente, todos conocemos y otras vienen de oscuras franjas de nuestra ignorancia. Si alguien llegara a comprobar que son relatos imaginarios, nos encontraríamos ante una imperdonable astucia de la desbordante realidad. Los cuentos y las historias, eso son y a ello responden los textos que tiene usted en sus manos. Cualquier. entiéndase bien, cualquier semejanza con la realidad, es responsabilidad estricta de su imaginación.