Si en el mundo se distribuyen lugares en los que las mujeres somos situadas desde niñas como, por ejemplo, princesas y después reinas del hogar, entonces la trayectoria de nuestras vidas parece que tiene puntos de llegada diseñados con mucha anterioridad. Así llegué a imaginar que tenía un castillo, que era una reina con un gran vestido blanco y que solo tenía que girar alrededor de un rey. Este texto da cuenta del exilio de ese mundo prediseñado, del doloroso cruce por un bosque donde solo caía sin cesar. |
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2021. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.