En la publicación de esta novela confluyen varios sucesos de relevancia, entre ellos el impacto que Ramona, novela de Helen Hunt Jackson, tuvo desde su publicación en 1884 en los Estados Unidos de América y en José Martí, quien desde Nueva York tradujo y prologó la edición al español. Por su valor histórico y literario, la ola de aceptación entusiasta convirtió la novela en un fenómeno social que en el siglo XX detonó representaciones en vivo y producciones fílmicas, incluida la cinta protagonizada por Dolores del Río.
Una edición rústica –en papel reciclado– fue publicada y distribuida masivamente en La Habana en 1978 con el epílogo del poeta Roberto Fernández Retamar, fundador y entonces director del Centro de Estudios Martianos. Como impulsor de la presente edición, –transcripción de aquella publicación– y admirador de la tradición literaria mexicana, Fernández Retamar adaptó en 2014 su epílogo para el público mexicano, en el que declara que “los adolescentes y acaso, sobre todo las adolescentes, me consta que amarán este libro”.