Enciclopedia de la Literatura en México

El bar de las orugas

Una de las formas más sencillas de esconder nuestras pupilas del sol, de la manera más útil, elegante y precisa, es cerrar los ojos con firmeza. Ahí podemos mirar el claroscuro de su rostro, las luciérnagas que se desprenden para encarcelarse en los párpados y que, antes orugas, se embriagan en el humor vítreo, para después despertarse ciegas de cruda agonía y esparcirse en cuerpos flotantes. Su aroma nos asfixia y nos deja atónitos, los ojos pestañean hasta llegar el eclipse. Así salimos de El Bar de las Orugas de Gustavo Ramírez Meléndez, un viaje de astronauta y submarino, que nos sumerge como un proyectil al mar profundo del universo, para salir disparados como ballesta al vacío inconmensurable del océano. Una muestra donde las leyes básicas de la física se aplican en la inventiva de nuestras turbaciones, aunque sin dejar de lado a un dios que se esconde y que después aparece como enemigo después de la guerra. Su visión reposa sobre una probeta antes que erosione el mundo.

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2017. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.