Esta antología es el encuentro de voces heterogéneas en su manera de contar la vida. El único punto de semejanza ante la diversidad fue narrar la cuarentena con los recursos propios.
No es la primera cuarentena de la humanidad, tampoco es la más tremenda. Lo que vuelve a esta cuarentena especial es que, a partir de su expansión por el mundo entero, los medios de comunicación ha jugado un papel fundamental -tanto en lo bueno como en lo malo- en su difusión.
Queremos concentrarnos en lo bueno, y es que el arte encuentra su tierra más propicia precisamente cuando la vida nos complica las cosas.
En épocas de excepcional crudeza, cuando se ha debido conquistar o defender con sangre la tierra que nos dará albergue y alimento, se han alzado murallas construidas por dioses y guerreros portentosos. Las afrentas más terribles del hombre al hombre han dado a la pluma de espíritus iluminados la trama y los símbolos exactos para encontrar, en lo más oscuro del cautiverio, el sentido de la vida. La reconstrucción de ciudades ultrajadas por enfrentamientos civiles ha hecho cantar a los poetas sus mejores trenos, y la pérdida de reinos portentosos ha dado a la literatura reinos de inmortal esplendor. ¿Por qué no íbamos a aprovechar el quiebre en los paradigmas y la afrenta a nuestra antigua zona de confort (que ya estaba siendo por demás "inconfortable"), para sumar nuestro canto a otros cantos?