Los labios del mar habla de la posibilidad de las ideas descabelladas. El mar como puerto y rincón. En la bahía de Ñut, un hombre convencido de la existencia de un lenguaje oceánico se sienta todos los días frente al mar y escucha a la espera de que un día eso signifique algo; una mujer que ha desenterrado los pies del hogar llega buscando un refugio solitario; y una bailarina de flamenco zapatea sobre una table de surf. El mar como lugar de encuentros. Breves, es verdad, pero significativos.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2019. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.
