Con experimentado ojo literario y tomando la realidad como materia prima, el autor de esta novela configura un personaje despiadado e inolvidable. Sonia Ceylán, moderno Tiresias, conocedora de los secretos de mujeres y hombres, es también el desiderátum que conjunta los apetitos de políticos y sacerdotes. Con un lenguaje afilado y brillante, que no ademite concesiones ni se oculta en eufemismos, Pterocles Arenarius va revelando los misterios del sexo y la religión a través de una aventura intensa, sórdida y deslumbrante. En resumidas cuentas, Demoníaca es una novela para leerse de un jalón y recordarse toda la vida.
Jorge Arturo Borja
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2012. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.