Alexander es habitante de una metrópoli perfecta, ahí sus ciudadanos no necesitan hacer el menor esfuerzo. El destino está planeado específicamente para cada uno, no hay dudas porque no hay decisiones… todo está dicho.
En un intento por ayudar a la sociedad que lo mantiene, Alexander vive una serie de hechos extraños que lo despiertan de esa cotidianidad perfecta y segura; se da cuenta de que tiene emociones y que no disfruta lo que hace, pues no hay pasión en la perfección.
Sin duda, una historia que te atrapará.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2018. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.