Ángel Hernández Barrera es un nombre que debemos tener presente pues se augura como un fran novelista, valiente, desgarrador, impetuoso y sincero.
El personaje central de Besos de limón, Gabriel, a la manera del Quijote ostenta y propone una nueva realidad cuya experiencia sagrada lo conduce a realizar toda clase de subterfugios para redimir el espacio convulso que le ha tocado vivir. Todo a través de la voz inequívoca de la esperanza y la quimera de un mundo mejor.
Besos de limón es una lectura obligada para los amantes de la buena literatura.
Besos de limón no se encuentra dentro de los esquemas de una novela romántica ni tampoco de lugares comunes. Besos de limón es un grito, un clamor a la humanidad por lograr el ideal de un mundo distinto ene l que los héroes sí existen y se proclaman auténticos, libres, congruentes con su ser social y además llenos de amor.