Los vínculos México-Cuba se remontan desde la llegada de los españoles a América. Cortés y sus conquistadores llegaron procedentes de Cuba a conquistar tierras mexicanas; caminar por ciertas calles de La Habana puede llegar a parecerse a una caminata en el puerto de Veracruz. La relación es, ha sido y será estrecha.
La música, la literatura, el cine, la historia y la fiesta, han brincado de tierra firme a la isla y viceversa, desde hace casi 500 años. El presente libro del maestro Luis Ángel Argüelles Espinosa, Puebla y Cuba, nos acerca a algunas de estas estampas que retratan la relación entre la entrañable isla y nuestra ciudad capital del estado.
Muestra algunas historias de los cubanos en Puebla; y de los poblanos en Cuba, que nos permiten atisbar sobre el tema de la migración, que en la actualidad parece vivir momentos muy complicados, ante un escenario global en el que el nacionalismo -y peor: el nativismo-, parecen ganar terreno en el ámbito político y social. En este libro podemos apreciar parte del fenómeno migratorio en su dimensión histórica y su presencia casi permanente en la historia de todos los pueblos del mundo.
Pero esta obra del historiador cubano-poblano, también nos hace reflexionar sobre los pueblos recibientes, las sociedades que permiten la llegada de estos seres humanos que por diversas razones, han decidido o se han visto obligados a salir de sus lugares de origen, para buscar mejores horizontes o simplemente para conocer mundo y aprender de él. Y nos permite hacernos cuestionamientos como ¿De verdad los mexicanos –y en especial los poblanos– somos tan abiertos a la migración?
El libro del maestro Luis Ángel es una extraordinaria aportación a la hermandad entre nuestros dos países, porque nos da una perspectiva novedosa y original de la realidad mexicana a los ojos de un habanero-poblano formado en el socialismo real.
José Luis Benítez Armas (Puebla, 2019)