El calor quema el agua, la achicharra. Las aves, al levantar el vuelo, estallan en ceniza. En los baches de las calles lunares se asan los últimos conejos sobrevivientes y las hormigas irritadas los devoran sin tregua.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2018. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.