Pétalos de sangre, la cuarta novela de este autor, describe la inequidad, la hipocresía y la traición a los campesinos y trabajadores de Kenia después de su independencia. Como en muchos de sus otras obras, buena parte de los sucesos descritos en la novela tienen base en hechos históricos y sociales. La obra es una dura condena a la corrupción y ambición de la élite política, económica y social de Kenia la cual, tras la lucha por liberarse de la dominación británica, no ha devuelto la riqueza de la tierra al pueblo sino que han perpetuado la injusticia social y la inequidad económica, rasgos de la opresión colonial. La obra lidia con el escepticismo producto de la liberación del imperio británico, contrastándolo con el inevitable poder de las huellas de la colonia y la inestable sed de modernización que sobrevoló las ciudades y el campo. En una trama policiaca y política, esta novela salta al pasado para recuperar mitos fundacionales y regresa al presente para ponerlos en duda. El escritor keniano N'gugi wa Thiong'o, mejor conocido como N'gugi. Activista, hijo de una familia capturada durante la rebelión Mau Mau, fue el primer escritor de África del Este en publicar una novela en Europa. Aun cuando algunos críticos han denunciado la obra de N'gugi como intrusiva, autoritaria y fuera de tiempo por su solución socialista a los problemas de su país, muchos concuerdan en que la novela es una importante contribución a la literatura mundial. Sus admiradores, por otra parte, la consideran una obra ambiciosa que presenta con integridad artística el manifiesto de su filosofía político social, además de que la consideran un retrato realista de la experiencia poscolonial de Kenia. No se puede dejar de mencionar el destacado trabajo de traducción de Patricia Olivier.