La eminente coreógrafa y bailarina Guillermina Bravo es la “gran abuela” de los bailarines mexicanos. Todos llevamos en nuestro cuerpo algo de ella, ya sea como herencia directa, ya como parte de una memoria colectiva que la contiene y la trasciende. Con este libro, que es una suerte de haikú en imagen, queremos celebrar sus 90 años de vida, a la vez que recordarla y hacerla nuestra en lo que es más suyo: el movimiento.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2008. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.