Willy de Winter, hijo de padre holandés y madre mexicana, llega a México en 1956. Es poliglota y traductor, llega a ser campeón de ajedrez, escribe sobre ajedrez. Considera el idioma como el regalo más precioso que haya estado en manos del hombre y lanza con este libro una colección asombrosa de palíndromas, versificadas, coherentes y de una riqueza jamás vista.
Picardía Palindrómica abarca desde un homenaje a países, a las artes y al amor, una vasta antología zoológica, una lista de palabras palindrómicas, una minitragedia griega, hasta una serie de versos escabrosos que dentro del ambiente de la palindromía adquieren una dulce y bella personalidad.
Esta “Nueva Picardía Palindrómica”, contiene todo el material de la primera edición, unas cuantas adiciones y como algo muy interesante, - así esperamos – una colección de palabras palindrómicas en lengua maya.
“…pero algo me sorprende y no sé hasta que punto dentro de mí mismo pueda aceptar el giro increíble, picaresco que ha dado Willy de Winter, en tantos de sus palíndromas. Yo he gustado mucho de la picaresca y la picardía, y personalmente, en mi vida, pues sí, ha habido muchísimas actitudes de pícaro, en todo, y no deploro que a veces esa conducta me ha llevado a lagunas situcaiones de arrepentimiento, por haber sido demasiado pícaro. Pero la gracia, cuando es auténtica en la picardía es verdaderamente graciosa, todos la aceptamos y lo celebramos…”
JUAN JOSÉ ARREOLA