La conducta humana va dirigida, invariablemente, hacia ciertos fines y objetivos, casi siempre relacionados con la satisfacción de necesidades fisiológicas básicas. Se necesita controlar los motivos biosociales. Si no realizamos esos controles se cae en frustración; lamentablemente se descuida la fuerza de incentivos.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2005. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.