El arte de caminar es más que salir a dar un paseo, robarle unos minutos al día o a las imposiciones sociales para ejercitarse; es una práctica liberadora que se convierte en nuestra aventura necesaria de cada día.
Para los espíritus mundanos que quieren hurgar en el horizonte, para los curiosos que no se contentan con los ejes viales, para los nostálgicos que prefieren la cantimplora de agua clara en lugar del café de máquina en la caseta de cobro, para los que prefieren la cascada del bosque en lugar del sauna cinco estrellas, a ellos les traemos esta obra del eremita de Walden.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2017. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.