La convicción de haber perdido un recuerdo que podría salvarnos la vida es explorada hasta sus ultimas consecuencias por Bibiana Camacho. Amenazada por la inminencia de un crimen terrible, la protagonista de Tras las huellas de mi olvido decide recorrer el centro de la Ciudad de México como quien examina su memoria reciente. Pocas veces la narrativa mexicana ha explorado la sensibilidad de una adolescente con un lenguaje tan duro y certero, digno de una novela negra, que nos obliga a encont5rar lo insinuado en las página de esta fascinante primera novela. Durante una semana crucial, la vida de Etél oscila entre la certeza de que un evento siniestro está por suceder y las ideas de vacío y sin sentido que la han invadido, apenas interrumpidas por sueños absurdos y claustrofóbicos, o la visión de una ciudad que parece una maqueta monstruosa a la que alguien olvidó agregar personas. Todos los encuentros tienen un carácter fantasmal y al mismo tiempo chusco; el trasvestí Isaac estrena pechos de silicón, Ramón y Lucía sufren un arresto que resulta ser una farsa policíaca, mientras que la madre de la protagonista se desliza por la pendiente de una locura salvaje. Con una prosa construida a base de frases cortas e implacables Bibiana Camacho entrega un relato en el que podemos mirar, como en un espejo fantástico, uno de los rostros de aquellos seres que se atreven a perder sus pasos y hasta la planta de los pies para salir del laberinto.