Y en el corazón del poemario el autor nos conduce por el atajo hacia sus filias cinematográficas. Qué manera de romperle los dientes a quienes necios, nos hubimos cerrado a la inteligente belleza de lo macabro, de lo sórdido o del kitsch. Leonardo Varela confirma con esta obra en la que con desenfadada seguridad innova y propone, la madurez de su poética y su lugar como unos de los más lúcidos (y lúdicos) poetas mexicanos. Estos resplandecientes poemas de oscuridad así lo muestran.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2007. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.